martes, 16 de junio de 2015

El virus

No esperaba encontrarte y me encontraste,
te metiste dentro de mí cual cocaína,
me mirabas con los ojos cargados de preguntas
y yo sin saber qué hacer, si contestarte.
Como un virus, me duele la barriga
y cada vez que voy al vater te recuerdo, 
pero también te recuerdo cada noche
y no puedo dormirme sin tocarme.
Que es verdad que suceden estas cosas
y los estudios científicos lo abalan 
pero es que yo no quiero ya más dramas,
que morirme contigo si te matas,
cantado en la ducha y con salero,
no te digo yo que no me guste,
pero más mola vivir sin las diarreas
y comer con apetito a todas horas
y poder dormitar cual oso pardo
y pasear con vaivén despreocupado,
sin volver constantemente la cabeza. 


No hay comentarios: